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Foto del escritorNereida Mora González

REFLEXIÓN SOBRE MIS PUNTOS FUERTES Y DÉBILES

Os diré algo más que he aprendido… a conocerme a mi misma, para poder pararme a pensar aquello que me hace más fuerte y aquello que debo mejorar.


Como docente los puntos fuertes que veo son: la predisposición para realizar tareas debido a que siempre estoy pensando en lo que puedo hacer para los alumnos, qué les puede gustar más o cómo realizar una determinada actividad; disfruto preparando cualquier clase y me imagino las reacciones de los alumnos; me considero una persona organizada y a la que le gusta llevar todo previsto, preparado y con la máxima perfección posible. Los puntos débiles que veo en mi como docente son: los nervios justo antes de dar la clase (aunque poco a poco con la experiencia se me van quitando); en algunas ocasiones me gustaría expresarme mejor para llegar todavía más a mis alumnos, sobre todo a la hora de no dar por hecho que saben algo; otro punto que quiero mejorar es no avergonzarme al hablar en inglés o pensar que mi nivel es bajo y por ello no llegar a soltarme.





Para una completa reflexión de mis puntos fuertes y mis puntos débiles, considero que es bueno destacarlo a nivel personal. Mis puntos fuertes como persona son: soy muy curiosa, me encanta aprender y estar en constante aprendizaje; emotiva y transparente; como he dicho antes soy organizada; me considero una persona con mucha paciencia y a la que no le gusta enfadarse o gritar; intento mirar el lado bueno de las cosas; soy divertida y tengo muy buen humor. Mis puntos débiles como persona son: algo tímida (aunque con las personas que tengo confianza o con los alumnos no); en algunas ocasiones soy introvertida; a veces me cuesta reconocer algo que he hecho mal o algún error.


A los profesores del centro y a mi tutor siempre me gusta ayudarlos en todo lo posible y he aportado en muchas ocasiones desde una ayuda o un favor hasta actividades o cualquier cosa que me pidieran e incluso me ofrecía a realizar todo lo que estuviera en mi mano.





Con lo que me quedaría principalmente de mi aprendizaje a nivel académico serían todos los conocimientos teóricos que desarrolla el profesor día a día y en los que he podido profundizar, y sobre todo con la evolución que hay desde que empezamos la carrera hasta ahora y más si hablamos de nuestra evolución a lo largo de ambas prácticas externas.


Mientras que a nivel personal me llevo tantas cosas… del centro, de los profesores, de mi tutor y en especial de los alumnos; sin ninguna duda a nivel personal me he sentido como en casa, como si fuera una profesora más y trabajase allí, completamente incluida en todos los planes. A excepción de claustros, tutorías o reuniones, pero considero que pueden querer su parte de intimidad o puede tratarse de otras razones.


Sin embargo, si he formado parte de actividades extraescolares o curriculares. Personalmente me he encontrado muy motivada, ha sido todo muy positivo tanto a nivel académico como a nivel personal y siempre he sentido que valoraban todo mi esfuerzo y mi trabajo.


Los profesores tenemos que estar en constante aprendizaje, tenemos que seguir aprendiendo día a día, nunca debemos pensar que hemos aprendido lo suficiente. Con ello quiero decir, que he aprendido mucho y sé realizar muchas cosas que antes ni me las imaginaba, como por ejemplo una programación o un TFG, pero que a su vez me falta mucho por aprender y por saber. Puede que acabe nuestro paso por los colegios hasta dentro de un tiempo o puede que acabe nuestro paso por la universidad, pero nuestro aprendizaje no acaba y nuestras ganas por conseguir nuestra plaza en las oposiciones tampoco. ¡A por todas y como siempre digo… ¡never give up!


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